EL CENTRO DE TU YO.

El centro de tu yo es la fuente de inagotables sentimientos que te permiten ser único en la multitud. En él puedes sentir y palpar la belleza que tienen los amaneceres cuando en la noche dejas que tu cuerpo en reposo permita a tu ser ver.

Cultiva la emoción que te envían los seres como tu y a través de ti haz como el mar que a través de las olas va dando la caricia y el amor en su vaivén.

Calma la sed y proyecta a tus semejantes todo ese desborde de bondad que a escondidas llevas dentro. Evita en lo posible dejarte llevar por las emociones pasajeras, sé firme en tus sentimientos ama a través de todo lo bueno, bello y hermoso de la vida. No mires con desdén a ningún semejante y quiere a quien te quiera, sin importarte los detalles y defectos. Todos somos seres imperfectos que estamos aquí en busca de la perfección, de la belleza y del amor.El mundo adolece de muchas fallas porque nosotros permitimos que sea así.

Aprende en la mirada de los niños, en la experiencia de los ancianos y sobretodo siente la alegría de trabajar con amor y en armonía. Digo armonía porque para mí es la palabra mas hermosa que va secundando al amor. Ama a tu esposa, a tus hijos , a tus amigos. Ama a todos los seres de nuestro pequeño mundo, enseña en la palabra el significado que tiene todo ser en la convivencia y el buen vivir. Roguemos al Creador porque seamos mejores.

Mitiguemos hasta donde sea posible las tristezas y desventuras de los demás, pero más que mitigar es abrir los ojos para que también entiendan la belleza del lenguaje, la abundancia que está en Dios y el bienestar en sus enseñanzas.

No te importe mucho la escasez que luego vendrán ciclos de abundancia.

Aprende a sentirte bien aún en las arenas del desierto.Sueña y en tus sueños haz oasis de alegría.

PARA MI CATIRE JURY.